El horno

Fue en 1920 cuando nuestros bisabuelos abrieron por primera vez las puertas de El Puente en la calle San Isidro de Chiva, y lo hicieron ya en torno a lo que sigue siendo el elemento clave del establecimiento: el horno de leña giratorio.

El horno, cuyo interior es de forma circular, tiene un diámetro de cuatro metros, moviéndose mediante un volante que hace girar los ejes que guían la plataforma de cocción.

La leña se introduce por una hornilla que se encuentra en la parte inferior izquierda. Se utiliza preferentemente la de naranjo, una leña de media densidad que ofrece un fuego constante y con llama que aporta un aroma y un sabor únicos a los productos que cuece.

La temperatura media a la que trabaja, ronda entre los 180 y los 200 grados, en función de las necesidades de cocción de cada producto.

Todas elaboraciones de El Puente entran y salen de forma manual con una pala, por la pequeña boca del horno.